domingo, 27 de noviembre de 2011

BRILLO LA NOSTALGIA


Tras la silueta
de tu cuerpo desnudo
brillo la nostalgia
una gota de suave fragancia,
una brizna de
amor compartido
y buscaba en ti
la añoranza de un sueño lejano,
agarrando tu mano
perdí la inocencia
que me llevó a un edén
como nunca había visto
distinto a los que había conocido,
atrapado en las redes
de un sueño que se volvió realidad
y te busqué como nunca había buscado
y te llamé como nunca había llamado
con la necesidad del que
llora en silencio deseando la luna,
pero los sueños son nubes
que se desvanecen en el basto cielo.
Una lágrima brillo
al reflejo del sol
y llorando con nuestros corazones
la vida nos devolvió
 donde las ninfas
juguetean en la noche,
donde solo una mirada
era capaz de ofrecer
lo más bello jamás observado.
Y  seguí besando y acariciando
tu alma que contemplaba
sin que el cansancio
aborreciera la estampa de verte,
esa alma que prisionera
 luchaba en las sombras
por alcanzar la libertad.
Y lloré…
para que mis lágrimas bendijeran
la pasión que se derrama
de donde no hay más cabida
e intenté vaciar tus sueños rotos
dando forma a la ilusión,
dando letra a las palabras,
y  vida a los deseos
que dormían inmóviles esperando
ser despertados
tan solo con un beso.

domingo, 13 de noviembre de 2011

GOLONDRINAS

Golondrinas que
alzáis vuestro vuelo elegante y veloz
atravesando calles, caminos y riachuelos
volando con su vuelo raso
acariciando casi el suelo,
buscando un sueño
que atraviesa un sendero
en el vacío de nuestra mente.
Golondrinas que vuestros nidos colgareis
en el estrecho rincón
del  alero de un tejado
y os metéis haciendo de el
vuestro hogar
y danzareis por el aire
 buscando el calor del verano
atravesando el corazón
de los recuerdos
un año tras otro,
recordándonos que la vida sigue
y que las ilusiones
sin vuestros pequeños cuerpos
acompañándonos
se perderían en el olvido.

sábado, 12 de noviembre de 2011

EL ULTIMO TREN

Perdimos el último tren
que nos habría de llevar a un sueño,
un sueño donde las estrellas
caen del cielo
y se acurrucan
en un corazón enamorado
buscando brillar
como nunca han brillado.
Un sueño que nos habría
de hacer alcanzar
la mas alta cúspide
que jamás hubiéramos escalado
a pesar del viento
y  las neblinas
que hieren el alma.
Aquel tren
que con suspiros recorría
como una lágrima
recorre la mejilla,
los raíles que nos llevaban
a un lugar muy lejano
donde reír, suspirar y soñar
era algo obligado,
hasta hacer volver
con nuestros deseos
las oscuras golondrinas de Bécquer
en los santos lugares
del espíritu,
allá donde con una caricia
 lloraba una ilusión
y allá donde con un beso
una ilusión dejaba caer una caricia.
Y en el oído mientras tanto
te susurraba
que eras una estrella
que cayó del cielo.
Pero perdimos el tren
aquel que nos hubiese llevado…
a lo más profundo del alma.

sábado, 5 de noviembre de 2011

ATARDECER


En el atardecer...
las hojas volaban
 como sueños inalcanzables
 que se deslizaban
entre la pasión y la dicha
haciendo alcanzar el éxtasis.
Y volaban galopantes
revoloteando, envolviéndose
unas con otras
por el  suelo de la razón
haciendo de las noches días
repletos de luz,
asomando en las ventanas de la conciencia
mil temores pero
también mil sentimientos.
Y en el atardecer
las hojas volaban
como sueños...
agazapados y furtivos
delante nuestro
haciendo de las horas minutos
y de una caricia lo mas bello,
aquello que tras las sombras
nos hacia vivir la vida
en la seductora
pero angustiosa agonía
que causa lo prohibido.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

QUIMERA


Suena la melancolía
como tristes versos
que te llaman en mi pensamiento
para acariciar con los dedos
de la imaginación
tu cuerpo etéreo
y  beber de tus lagrimas el cielo
mientras te agarro en mi fantasía.
Como una quimera
aplaudimos la triste balada
de una historia
que por poco…
lleva en el semblante
grabado el final.
Y rompen las olas
en mi mente
el vaivén de los sueños
acariciando con su tibia y salada agua
el compás de espejismos
que sin quererlo
se adueñan de mí,
de mis noches
donde te llamo
y escapas corriendo
presa de la angustia y el miedo
y sabiendo que desaparecerás
en la oscura realidad
del frio atardecer de mis días.