martes, 21 de julio de 2009

NOCHE


En la noche,
las sombras
rejuvenecen en el tiempo
y la luna testigo
hace sentir sus rayos pálidos
en la piel etérica de su semblante,
besando su escurridiza silueta
y atrayendo hacia sí
el amor platónico de lo invisible
por el basto y abrupto
mar de la oscuridad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario