TU

No hace falta que la luna brille
para que tus ojos brillen.
Ni que el mar refleje su inmensidad
en la inmensidad de tu corazón.
Pues tus sueños son
como sombras que dan vida
a un enamorado.
Tus besos vuelan como mariposas
que se desprenden de tus labios
buscando la orla de la esperanza
para posarse dulcemente.
Y tu alma...
tu alma la quisiera solo para mí,
cuando estés triste para consolarte,
cuando estés llena de amor
para pedírtelo,
y cuando me anheles
para entregarme en cuerpo y alma.